De forma inconsciente cada vez que tomas una fotografía utilizamos un ángulo de disparo. Lo que además no sabemos es que depende de cómo posicionemos nuestra cámara respecto a nuestro sujeto, la percepción es completamente distinta.
Yo te pregunto, ¿qué quieres trasmitir?
Conseguir la intención de esta pregunta, no se basa solo en la disposición de los objetos y la luz. Es importante que conozcas los diferentes ángulos y su connotación.
Así que, vamos a por ello.
Ángulo Normal
Es el más habitual para tomar fotografías y al que solemos recurrir de forma natural. Consiste en colocar la lente de la cámara a la altura del sujeto y paralela al suelo.

¿Para qué se utiliza en ángulo normal?
Este tipo de ángulo funciona muy bien cuando se quiere trasmitir naturalidad. Recurre a este tipo de ángulo para tus fotografías de marca personal, que luego utilizarás en tu foto de perfil o en publicaciones en las que quieras contar cosas sobre ti. Trasmitirás confianza y cercanía. Y por supuesto, no se te olvide mirar a cámara.
¡Atención! Si lo tuyo es fotografía infantil, recuerda bajar tu cámara a la altura de los ojos del niño.
Otra de las connotaciones de este tipo de ángulo es para generar estabilidad y tranquilidad. Recurre también a él cuando quieres mostrar un objeto tal y como normalmente lo vemos, de forma objetiva.
Ángulo Picado
Aunque el ángulo normal es el más utilizado, te aconsejo que pruebes con ángulos como el picado. Este ángulo lo conseguimos situando la cámara a una altura superior a los objetos y orientada ligeramente hacía el suelo.

¿Para qué se utiliza el ángulo picado?
Si lo utilizas en fotografía de retrato de personas, el sujeto trasmitirá debilidad o inferioridad, ya que se ven más pequeños.
En ocasiones, como en fotografía de niños, animales u objetos de pequeñas dimensiones, se utiliza este ángulo para trasmitir su fragilidad.
Además, con este ángulo, conseguirás mayor profundidad y resaltaras cosas que no se pueden ver a la altura de los ojos. Por ejemplo, el contenido de una caja o un vaso.
Ángulo Contrapicado
Sería lo contrario al anterior, situaríamos la cámara por debajo de los elementos de la escena con una ligera inclinación hacia arriba.

¿Para qué se utiliza el ángulo contrapicado?
Si con el ángulo picado conseguíamos trasmitir inferioridad en fotografía de retrato, con el contrapicado conseguimos justo lo contrario, el personaje adquiere superioridad y fuerza.
Muy utilizado para fotografía arquitectónica, para dar mayor grandiosidad a edificios o monumentos.
En redes sociales no se utiliza mucho, aunque te recomiendo que experimentes con ella para dar mayor creatividad a tus fotografías.
Ángulo Cenital
En este caso la cámara se sitúa encima de los elementos a fotografiar, es decir desde arriba.
Si, lo habéis adivinado, es mi favorito y el que más me gusta usar en mis fotos.
Hace poco en mi Instagram @lidiamostajo os hablaba de los famosos flat lay una tendencia de imágenes en redes sociales, en el que se utiliza el ángulo cenital para fotografiar los objetos.

¿Para qué se utiliza el ángulo cenital?
La imagen que obtengas con este tipo de ángulo será plana y sin relieve, pero nos sirve para mostrar escenas que con otros ángulos se pierde información. ¿Por ejemplo?, en gastronomía, donde se quiere mostrar el plato completo.
También, con la suficiente altura, podrás mostrar el contexto en el que se sitúa la escena. Ten en cuenta el tamaño de tus elementos para calcular la altura que necesitas según lo que quieras mostrar.
Ángulo Nadir
Este ángulo sería un contrapicado llevado al extremo, es decir posicionar la cámara hacía arriba perpendicular al suelo. Vamos, como si fueras una hormiga y vieras el mundo desde abajo.

¿Para qué se utiliza el ángulo nadir?
Este tipo de ángulo es poco utilizado en redes sociales. Su uso principal es en cuentas de fotografía arquitectónica y como os podréis imaginar se utiliza para engrandecer aún más, que el contrapicado, los elementos.
Si quieres algo más creativo y con un punto de vista diferente, te invito a que lo explores ya que casi nunca miramos hacia arriba y al hacerlo podemos sorprendernos de lo que podemos fotografiar.
Con este cerramos los 5 tipos de planes que podemos encontrar en función del ángulo en el que posicionamos la cámara.
Un último consejo, las reglas están para romperlas, prueba y experimenta con cada uno de ellos para lograr diferentes objetivos.
Me cuentas, ¿cuál es el que más utilizas?