Cuando disfrutas con algo no importa el esfuerzo que te ha costado. Y es que los 450 km que nos hicimos en una tarde para poder hacer durante apenas dos horas unas fotografías en los campos de lavanda de Brihuega, merecieron la pena.
Y más si lo haces en buena compañía. Alguien que comparte tu pasión, alguien que sabe que siempre hay tiempo para una foto más. En mi caso es mi amiga Pilar, con ella las horas parecen minutos y las locuras parecen buenas ideas.
No es la primera vez que lo hacíamos. El año pasado probamos la experiencia, en unos campos más pequeños cerca de San Felices.

Si al ver al ver la foto ya te he dado algo de envidia, te invito a que leas este artículo en el que te voy a contar dónde puedes encontrar estos campos de lavanda y algunas cosas que debes saber sobre fotografiarlos.
Las fotografías de campos de lavanda
De lo primero que te quiero advertir es que si pones campos de lavanda en cualquier buscador, las imágenes posiblemente que te salgan están algo alteradas. Esos colores tan vivos no son reales en la mayoría de las fotos. Pero ojo, tampoco son tan apagados como el de las fotos que yo te muestro.

Si conoces un poco mi estilo, sabrás que me gusta iluminar mis imagines y rebajar la saturación y contraste de las fotos. Así que la edición que vas a ver en mis fotos aclara bastante el tono real de los campos de lavanda.
Cuando ir a visitar los campos de lavanda
Teniendo en cuenta que cada año la climatología cambia y por tanto el momento de floración de la lavanda, yo te aconsejaría que fueras la primera quincena de julio. En la segunda también es posible que sigan bonitos los campos, pero la intensidad de sus colores puede que haya bajado.
Nosotras aprovechamos las horas de luz el atardecer. Aunque en esta ocasión teníamos una tormenta cerca y los rayos de luz brillaban por su ausencia. Pero siempre vemos el lado bueno de las cosas, menos sombras en la cara y una iluminación más fácil de trabajar.

Donde están los campos de lavanda de Brihuega
La verdad es que son muy fáciles de encontrar. Nosotros veníamos por la A-2 dirección Guadalajara y en la salida 103 cogimos la N-204 dirección Brihuega.
Os pueda asegurar que casi desde el minuto uno de salir de la autovía el espectáculo está servido.
Durante 15 minutos recorréis diferentes campos de lavanda, a cuál más bonito. Hay un aparcamiento habilitado junto a unos de los campos más famosos que os recomiendo visitar, pero si queréis hacer fotos sin tener que esquivar a la gente, existen otras opciones.

Nosotras nos fuimos directas a los campos de lavanda que hay pasado Brihuega. Nada más pasar el pueblo hay un cartel que te indica su camino. Había mucha menos gente y también son muy bonitos.
Un consejo, aprovechar a visitar el pueblo, en esas fechas lo decoran con los tonos morados característicos de la lavanda y está precioso.
Qué fotos hacer en los campos de lavanda
Te dejo algunos ejemplos en este artículo, pero como te adelantaba yo tengo un estilo muy especial en la postproducción de las fotos.
Si hablamos desde el punto compositivo, te aconsejo que juegues principalmente con dos tomas. Un plano general en el que se pueda ver los campos y toda su extensión y otro más cerrado utilizando como fondo el color característico de la lavanda.

Los campos tienen un color muy potente, así que puedes dejar que sean los protagonistas y optar por un look neutral o darle contraste a tu imagen y llevar un vestido con un color potente. En Pinterest puedes encontrar infinidad de inspiración.
También te aconsejo que lleves algo de atrezo, podrás jugar con diferentes elementos y salirte de la típica foto mirando a cámara. Nosotras nos llevamos, una cesta, unos sombreros, unos libros, un abanico, un espejo y hasta una silla.

Por último, te quiero advertir que en cuanto llegues oirás un sonido constante, que no es otra cosa que el zumbido de las abejas. Pero a no ser que les tengas alergia, no es algo de lo que debas preocuparte, puesto que si no las moletas no hacen nada.